Los tatuajes han evolucionado más allá de su función decorativa para convertirse en una forma de vestimenta que refleja la identidad y la individualidad de quienes los llevan. Como una prenda permanente, cada tatuaje cuenta una historia y forma parte del estilo único de cada persona, haciendo de la piel un lienzo donde la moda, el arte y la vida se entrelazan.
Por Mateo Modic | 16 de enero de 2025